La experiencia de siembra de un bonsái es es la oportunidad para conectar con la naturaleza de una manera íntima y personal. Cada paso del proceso es una oportunidad para reflexionar sobre el valor del tiempo, la dedicación y el amor, valor es intrínsecos al papel de una madre en la vida de sus hijos. Los participantes tendrán la oportunidad de moldear activamente la forma y el carácter de su árbol, lo que refleja la influencia que las madres tienen en la vida de sus seres queridos. Además, el proceso de cuidado continuo del bonsái después del taller sirve como recordatorio constante del amor y la atención que requiere la relación madre-hijo.

Inscripción previa, máximo 30 participantes mayores de 13 años. Incluye materiales.